03 diciembre 2006

Medio Ambiente

Las Rozas cuenta con un entorno natural envidiable pero, sin embargo, vive al margen de él. Las posibilidades que ofrece para que los vecinos puedan disfrutar del mismo son inmensas pero, hasta el momento, se ha hecho poco uso de las mismas y cuando se hace se hace a medias más "para salir en la foto" que con un plan elaborado para que las actuaciones sean útiles. Me refiero a casos como el barranco de Majalacabra o al canal de remo del pinar. Amboso son ejemplos de actuaciones que, tras su inauguración han entrado en un rápido declive. En Majalacabra las especies de árboles y plantas que se plantaron a modo de sendero botánico, han ido desapareciendo progresivamente porque no hay nadie que se procupe de ellas. Respecto al canal de remo... mejor le podríamos cambiar el nombre.

En Las Rozas hay todo un catálogo de actuaciones a realizar. Muchas de ellas son reclamadas insistentemente por los vecinos en los foros y tan obvias que es difícil comprender por qué no se han llevado a cabo aún:

- carriles bici. Las posibilidades son inmensas: entre Las Rozas y Las Matas, desde Las Matas hasta Monterrozas junto a la avenida de Atenas, desde Monterrozas hasta Las Rozas... Es decir, se puede construir un anillo que dé casi la vuelta completa al municipio y que pueda ser empleado para que aquellas personas que lo deseen se desplacen con este medio de transporte, para hacer deporte o, simplemente, para pasear.
- senderos ecológicos. Establecer una red de senderos a través de los campos y encinares que rodean el municipio para que los vecinos puedan disfrutar de la naturaleza que tienen tan próxima y, a la vez, tan lejos (parece evidente que esta es una medida totalmente opuesta a la de recalificar todo para urbanizar cada centímetro cuadrado del municipio). El objetivo será que estos senderos pudieran llegar a recorrer no sólo las fincas de titularidad municipal sino también algunas de las fincas privadas existentes, siempre que sea posible alcanzar un acuerdo con sus titulares y sus actividades lo permitan.
- creación de un centro de Conservación del Medio Ambiente, responsable poner en marcha estas iniciativas y de velar porque se mantengan vivas y no caigan en el abandono tras su inauguración. Entre sus actividades, además de las propias de conservación se encontrará la de el desarrollo de actividades como aulas de medio ambiente para que los niños de los colegios de Las Rozas aprendan a tomar conciencia de la importancia de cuidar la naturaleza. Bueno, los niños y también los adultos ¿por qué no?.
- terminar el campamento urbano que hay junto al pinar. Desde hace varios años llevo viendo un cartel que dice algo así como "Adecuación de finca El Pilar para campamento urbano". Ya está bien que en cinco años no haya habido tiempo para concluir la obra -aunque parece que ahora algo se mueve y, al menos, están arreglando la valla. Eso sí, mientras tanto para los campamentos de verano del ayuntamiento se alquilan las instalaciones de colegios privados, como ha sucedido este verano. De nuevo, otra muestra de las prioridades de nuestros próceres locales.
- recuperar zonas degradadas del municipio. Por ejemplo, el entorno junto a los talleres de Talgo que más parece sacado de una película apocalíptica que de un municipio que presume de tener una de las rentas más altas del país.

En resumen, se trata de volver a integrar Las Rozas con su entorno natural, de donde nunca se debió separar.

Y ya para finalizar, quiero hacer una mención especial a dos iniciativas relacionadas con las energías renovables:

- la primera, promover que las estaciones de servicio de la localidad dispongan de biodiesel para que los vecinos del municipio podamos, de esta forma, contribuir en la medida de nuestras posibilidades a reducir las emisiones contaminantes.

- otra, desarrollar un plan de promoción de la energía solar. Las nuevas reglamentaciones de construcción obligan a su instalación en nuevas construcciones, pero, salvo grandes reformas, no dice nada de las ya existentes. La instalación de energía solar fotovoltaica en viviendas unifamiliares debidamente orientadas (de las que hay muchas en nuestro municipio) es rentable siempre que se considere una inversión a largo plazo y se cuente con la financiación adecuada. Desde el ayuntamiento se pueden impulsar dichas instalaciones (y de energía solar térmica) bien proporcionando la financiación de forma directa o alcanzado acuerdos con entidades financieras para que lo hagan con la garantía municipal.

Efectivamente, con esto no vamos a acabar con el problema porque el impacto será más bien simbólico, pero puede ayudar a que Las Rozas se convierta en un ejemplo para otros municipios. Ya se sabe "un grano no hace granero, pero ayuda al compañero".